Irlanda

Qué ver en Cork. Guía completa de la ciudad de los puentes

Conocida por ser la segunda ciudad más grande de Irlanda, Cork es un destino lleno de vida, historia y buen ambiente. Situada a orillas del río Lee y extendida sobre varias islas, es también llamada “la ciudad de los puentes” por los más de 30 puentes que unen las distintos partes de la ciudad. Su ambiente joven y creativo, gracias a la universidad, se mezcla con pubs acogedores donde siempre suena la música en directo, y con rincones modernos que la convierten en una ciudad con mucho carácter. Además, Cork es una base perfecta para explorar algunos de los lugares más emblemáticos del sur de Irlanda, como el Blarney Castle, el colorido pueblo de Cobh o la espectacular ruta del Anillo de Kerry.

Tras pasar 20 días en la región y visitar su principal ciudad varias veces, en esta guía te cuento qué ver en Cork ciudad y te doy algunos consejos e informaciones prácticas para que disfrutes al máximo de tu visita, tanto si vienes un día como si decides quedarte varios.

Qué ver y hacer en Cork. La mejor ruta por la ciudad

La mayoría de viajeros eligen visitar Cork en un día en medio de una ruta por Irlanda o por la zona sur de la isla Esmeralda. La ciudad es relativamente pequeña y muy caminable, por lo que dedicarle 24 horas es un tiempo más que adecuado si dispones de los días contados y no quieres perderte todo lo que ofrecen sus alrededores. Por ello, aquí te comparto una propuesta de ruta que empieza en el Mercado Inglés y que te llevará por lo más destacado que ver en Cork y lo mejor que hacer en la ciudad más importante del sur de Irlanda.

1. English Market, el mercado que visitar en Cork

Comienza tu ruta por los lugares más destacados que ver en Cork en el English Market. En funcionamiento desde 1788, es uno de los mercados cubiertos más emblemáticos de Irlanda y más antiguos de Europa. Aquí puedes encontrar desde pescados y mariscos frescos, hasta quesos artesanales, panes caseros, carnes locales y productos gourmet de todo el mundo. Está abierto de Lunes a Sábado de 8.30h a 18h.

A tan solo 5 minutos del English Market da comienzo todos los días este free tour por Cork a las 11h. Te recomiendo desayunar y dar un paseo por el English Market y después unirte a este recorrido guiado por el centro histórico para conocer todos los secretos de la ciudad.

2. Shandon, el barrio más auténtico que ver en Cork

Tras 2 horas recorriendo lo más destacado del centro histórico, cruza hacia el lado norte del río Lee para conocer el barrio que ver en Cork con más carácter. Shandon es un barrio con un aire auténtico, donde las fachadas coloridas se mezclan con calles estrechas y tranquilas. Pasear por aquí te permite descubrir un lado menos turístico de la ciudad, con pequeñas tiendas, galerías locales y rincones llenos de historia.

El barrio es fácilmente reconocible gracias a la torre de la iglesia de St. Anne, coronada por un gran reloj y famosa por las Shandon Bells. Además, está muy ligado a la historia gastronómica de la ciudad, ya que aquí se encuentra el Cork Butter Museum. Todos ellos, algunos de los lugares de interés que ver en Cork de los que hablaré más extensamente en los siguientes puntos. 

3. Subir a la torre de St Anne y tocar las Shandon Bells, algo que hacer en Cork

Si hay una experiencia que hace especial al barrio de Shandon, son sin duda las Shandon Bells, las famosas campanas de la Iglesia anglicana de St. Anne. Subir a su torre, coronada con una veleta en forma de salmón como guiño al río Lee y a la tradición pesquera de la ciudad, es una de las cosas que hacer en Cork indispensables. Y es que además de admirar su interior y disfrutar de una de las mejores panorámicas de la ciudad una vez arriba: ¡puedes tocar tú mismo las campanas! El conjunto está formado por ocho campanas históricas que datan del siglo XVIII, y que siguen sonando sobre la ciudad desde lo alto de la torre. Las encontrarás al subir el primer tramo de escaleras en un pequeño espacio con partituras sencillas para poder interpretar melodías conocidas. ¡Es una experiencia única y de lo más original! Tuvimos la mala suerte de que justo cuando nosotros fuimos las campanas no podían tocarse por una obra que se estaba haciendo. Pero para compensar de alguna forma pusieron unas pequeñas campanas con las que pudimos disfrutar de tocar algunas de las partituras que tienen allí.

Tras la parada para tocar las campanas, la subida a la torre continúa hasta llegar arriba para disfrutar de una de las mejores vistas panorámicas de Cork, con sus puentes, las casas de colores y el río Lee serpenteando por la ciudad. Además, podrás ver de cerca el famoso reloj de la torre, conocido cariñosamente como “el mentiroso de las cuatro caras” porque cada esfera parece marcar una hora diferente. Cuando bajes de nuevo no te olvides de visitar el interior de la iglesia, sencillo pero con algunos detalles interesantes. El acceso está incluido con la entrada a la subida de la torre, así que no te lo pierdas.

4. Cork Butter Museum, el museo de la mantequilla

Puede que oír hablar de un museo de la mantequilla te sorprenda, pero lo cierto es que el Butter Museum es uno de los lugares más curiosos e interesantes que ver en Cork. Y no es casualidad, ya que durante los siglos XVIII y XIX, la ciudad llegó a ser la mayor exportadora de mantequilla del mundo, lo que convirtió a este producto en un auténtico motor económico para la región.

El museo, ubicado en un antiguo edificio en el mismo barrio de Shandon, recorre esta historia tan particular mostrando desde técnicas tradicionales de elaboración hasta el papel clave que tuvo la Cork Butter Exchange, que en su época fue el mercado de mantequilla más grande del planeta. Entre sus piezas más llamativas se conserva incluso mantequilla milenaria, hallada en turberas irlandesas y que se ha mantenido intacta gracias a las condiciones naturales del suelo. Aunque no es una visita imprescindible, si dispones de más de un día en Cork o viajas con niños, es algo interesante que hacer ya que la exposición es didáctica y muy visual.

5. St Mary St Ann, la catedral católica de Cork

La Catedral de St. Mary & St. Anne es la catedral católica de Cork y un lugar con mucha carga simbólica en la ciudad. Construida a finales del siglo XVIII, sustituyó a un templo anterior destruido durante las tensiones religiosas de la época. Desde entonces se ha convertido en el centro espiritual de la comunidad católica de la ciudad, frente a la Catedral anglicana de St. Fin Barre’s. El edificio destaca por su torre neogótica con una aguja que alcanza los 50 metros, visible desde varios puntos de la ciudad, lo que le ha valido el apodo de la “North Cathedral”, por su ubicación al norte del río Lee. Aunque ha sufrido varias reformas a lo largo de los siglos, conserva su carácter y un interior amplio donde llaman especialmente la atención las vidrieras victorianas y que contrasta con la sobriedad exterior. Si buscas recorrer lo imprescindible que ver en Cork en un día porque no dispones de más tiempo, quédate con la imagen exterior que obtendrás desde lo alto de la torre de st Anne y sigue tu recorrido en dirección a Elisabeth Fort. 

6. Pope’s Quay, el rincón más fotogénico que ver en Cork

Te recomiendo hacer una pequeña parada de camino hacia Elisabeth Fort para visitar uno de los rincones más fotogénicos que ver en Cork. Se trata de Pope’s Quay, el muelle situado a orillas del río Lee donde podrás ver varios edificios históricos restaurados. Entre ellos destacan un conjunto de casitas con fachadas en colores pastel construidas en el siglo XIX, en plena expansión de la ciudad, y que han sido habitadas históricamente por comerciantes y familias trabajadoras vinculadas al puerto. Obtendrás las mejores imágenes cruzando de nuevo hacia el otro lado del río desde donde podrás continuar tu paseo hacia el fuerte.

7. Elisabeth Fort, un lugar histórico que visitar en Cork

En unos 15 minutos andando llegarás a Elizabeth Fort, una de las joyas históricas imprescindibles que ver en Cork. Aunque muchos viajeros lo pasan por alto, es una visita que merece la pena y que además es totalmente gratuita. El Fuerte Elisabeth es una fortificación del siglo XVII construida originalmente durante el reinado de Isabel I de Inglaterra para proteger la ciudad de posibles rebeliones y ataques. En su momento estaba situado fuera de las murallas medievales, aunque hoy el crecimiento urbano lo ha dejado integrado en pleno centro. A lo largo de los siglos, el fuerte ha tenido varios usos: cuartel militar, prisión, comisaría de policía e incluso refugio durante tiempos de conflicto. Esta versatilidad lo convierte en un lugar cargado de historia, que refleja la evolución de la ciudad.

Además de su interés histórico, las vistas panorámicas que ofrece desde sus murallas son otro de los motivos por los que yo lo incluiría en la lista de lugares que ver en Cork en un día. Desde lo alto se pueden contemplar la Catedral de St. Fin Barre’s, las calles del centro y los tejados de la ciudad. Hoy en día, Elizabeth Fort se ha reconvertido en un espacio abierto al público con exposiciones, visitas guiadas y actividades culturales. Está abierto de 10 a 17h de martes a sábado y de 12 a 17h los domingos. Por unos pocos euros podrás coger una audioguía en la entrada si te interesa profundizar más durante la visita e incluso unirte a unos de los tours guiados que realizan por solo 5€.

8. San Finbar, la principal catedral de Cork

Y en tan solo unos minutos desde el fuerte, se sitúa la principal catedral de la ciudad, la Catedral de San Finbar. Sin duda, es uno de los edificios más impresionantes que ver en Cork y todo un símbolo de la ciudad. Se trata de una catedral anglicana construida en el siglo XIX sobre el lugar donde, según la tradición, San Finbar, patrón de Cork, fundó un monasterio en el siglo VII. El edificio actual, diseñado por el arquitecto William Burges, es de estilo neogótico francés y fue inaugurado en 1879 tras más de una década de obras.

Lo primero que llama la atención son sus tres torres puntiagudas, visibles desde varios rincones de la ciudad. El exterior está decorado con decenas de esculturas y detalles tallados en piedra, que representan desde escenas bíblicas hasta criaturas fantásticas, un guiño al estilo medieval. Un detalle curioso es que en el exterior encontrarás una escultura dorada llamada el “Ángel de la Resurrección”, que según la tradición local tocará la trompeta al fin del mundo. Esto ha alimentado todo tipo de leyendas y hace que muchos visitantes se detengan a buscarlo antes de entrar. Se puede visitar el interior pagando una entrada de unos 8€ de lunes a sábado de 9 a 17h. Los domingos el horario varía por los servicios religiosos por lo que es conveniente comprobarlos en su web si tienes intención de acceder este día de la semana.

9. University College Cork (UCC), una universidad de cuento

La University College Cork, fundada en 1845, es una de las universidades más prestigiosas de Irlanda y al mismo tiempo uno de los lugares más bellos que ver en Cork. Su edificio principal, conocido como el Main Quadrangle (Main Quad), parece sacado de un libro de Harry Potter: un conjunto neogótico de piedra gris con torres, arcos y un gran patio central rodeado de cuidados jardines. Un detalle curioso es que en el edificio todavía se conservan los antiguos galpones de piedra usados como prisión universitaria para estudiantes revoltosos, además de inscripciones y escudos que cuentan parte de la historia de la institución. 

La UCC está abierta al público, por lo que cualquiera puede recorrer sus jardines y senderos arbolados y pasearse entre las esculturas repartidas por el recinto y la mezcla de edificios históricos con construcciones modernas que aquí se ubican. Si dispones de tiempo suficiente, merece la pena también visitar la Glucksman Gallery, un espacio de arte contemporáneo dentro del campus que suele tener entrada gratuita. A unos pocos pasos de la universidad está el Fitzgerald Park, el siguiente punto de este recorrido por lo más destacado que ver en Cork.

10. Fitzgerald Park, el pulmón verde que visitar en Cork

Frente a la universidad y a orillas del río Lee encontrarás el Fitzgerald Park, el gran pulmón verde de la ciudad. Sin duda, es uno de los espacios más agradables para desconectar un rato durante una ruta por lo más destacado que ver en Cork. Se trata de un extenso parque urbano creado en 1902 con motivo de la Exposición Internacional de Cork, y que desde entonces se ha convertido en el lugar favorito de locales y visitantes para pasear, hacer picnic o simplemente relajarse. Entre sus senderos encontrarás esculturas, fuentes ornamentales, jardines cuidados, un estanque con patos y un parque infantil chulísimo, lo que lo hace especialmente atractivo si tu también visitas Cork con niños. 

En el centro del parque está además el Cork Public Museum, uno de los mejores museos gratuitos que visitar en Cork, que ofrece una pequeña pero interesante colección sobre la historia de la ciudad. No te olvides de acercarte a uno de los rincones más fotogénicos del lugar, el Shakey Bridge (Daly’s Bridge), un puente colgante de 1926 que conecta el parque con la otra orilla del río. Su nombre viene de la ligera vibración que se siente al cruzarlo, convirtiéndolo en una experiencia divertida y curiosa.

11. Cork City Gaol, una antigua prisión con historia

Todavía queda una visita interesante que hacer en Cork antes de volver de nuevo al centro. Se trata de la Cork City Gaol, una antigua prisión del siglo XIX situada al otro lado del río Lee al norte del Fitzgeral Park. Construida en 1824, fue diseñada como una cárcel modelo para reflejar los ideales de “orden y moralidad” de la época victoriana, aunque pronto se convirtió en un símbolo de represión y sufrimiento.Por sus celdas pasaron desde delincuentes comunes hasta presos políticos, especialmente durante los turbulentos años de principios del siglo XX en Irlanda. Las condiciones eran duras y muchos prisioneros acababan siendo enviados a trabajos forzados o incluso deportados a Australia. La cárcel cerró en 1923 y hoy funciona como museo.

La visita te transporta a aquella época gracias a recreaciones con figuras de cera, exposiciones y objetos originales que muestran la vida de los presos y los guardias. Recorrer los pasillos y las celdas resulta impactante, sobre todo cuando se descubren historias reales de quienes estuvieron encerrados aquí. Un detalle curioso es que, tras su cierre, el edificio albergó durante años una emisora de radio, por lo que algunas salas también muestran esa etapa más amable de su historia. Sea como sea, esta prisión hoy se ha convertido en uno de los lugares más impactantes y curiosos que visitar en Cork. Ofrece una experiencia muy diferente a los típicos museos: es un viaje al pasado que ayuda a entender mejor la historia social y política de la ciudad. Te recomiendo reservar con antelación tu City Goal Tour con audioguía en español y organizar tu visita a última hora si solo cuentas con un día en Cork.

12. Callejear por el Casco Antiguo, algo que hacer en Cork

Una vez finalizada la visita a la prisión, vuelve de nuevo al centro y recorre las principales calles del casco antiguo. Empieza por St. Patrick’s Street, conocida cariñosamente por los locales como “Pana”, la arteria comercial más importante de la ciudad. Su trazado curvo sigue el cauce original del río Lee, y hoy está repleta de tiendas, grandes almacenes y cafés. Ganó varias veces el premio a “la mejor calle comercial de Irlanda”, y es también el escenario principal de desfiles y celebraciones como el St. Patrick’s Festival. A solo un paso de St. Patrick’s encontrarás Oliver Plunkett Street, una calle peatonal perfecta para pasear con calma. Es más íntima y animada que la anterior y combina tiendas independientes, boutiques, restaurantes y pubs tradicionales donde suele sonar música en directo. Por último, no te pierdas Paul Street, más pequeña pero con mucho encanto y un carácter más local. Está llena de cafés, librerías y pequeñas tiendas, y en sus alrededores se encuentran algunos de los rincones más alternativos de la ciudad, como el Paul Street Shopping Centre o callejones con arte urbano.

Perderse sin rumbo por estas calles que forman el corazón del centro histórico es de lo más interesante que hacer en Cork para disfrutar de la auténtica esencia de la ciudad.

EXTRA. Blackrock Castle, el castillo que ver en Cork

Si dispones de coche, aprovecha para hacer una última parada antes de finalizar tu dia en Cork. A orillas del río Lee, a solo unos 5 km del centro de la ciudad, se alza el Blackrock Castle, una fortaleza del siglo XVI que parece sacada de un cuento. Originalmente fue construido por orden de Isabel I de Inglaterra para proteger el puerto de la ciudad de ataques piratas y, con el tiempo, se convirtió en un símbolo. Hoy en día, el castillo no solo conserva su aire medieval, sino que además alberga el Blackrock Castle Observatory, un centro de ciencia y astronomía que combina historia y tecnología de forma sorprendente. Aquí podrás explorar exposiciones interactivas sobre el espacio, aprender sobre el universo y hasta enviar mensajes a las estrellas a través de su sistema especial. El castillo también cuenta con una terraza con vistas ideal para contemplar el paisaje y entender la importancia estratégica que tuvo en el pasado.

Otros lugares que ver en Cork ciudad

Si dispones de más de un día en la ciudad, te dejo un listado de rincones extra que ver en Cork perfectos para explorar la cara menos turística de la ciudad:

Nano Nagle Place: un espacio cultural y comunitario en antiguos edificios conventuales, con jardines tranquilos y exposiciones que cuentan la historia de Nano Nagle, una figura clave en la educación en Irlanda.

Elizabethan Red Abbey: la torre en ruinas de un monasterio agustino del siglo XIV, uno de los edificios medievales más antiguos que ver en Cork.

Saint Peter’s Cork: una iglesia desacralizada que hoy funciona como centro cultural con exposiciones temporales y eventos.

Triskel Arts Centre: un centro de arte contemporáneo en una antigua iglesia, donde se celebran conciertos, cine independiente y exposiciones.

The Everyman Theatre: un teatro clásico de estilo victoriano con una cartelera variada que va desde obras de teatro hasta comedia y música.

Coal Quay (Cornmarket Street): una zona histórica del mercado al aire libre donde antiguamente llegaban los productos a la ciudad, hoy con ambiente local y tiendas peculiares.

Cork City Hall: un imponente edificio a orillas del río Lee, símbolo de la Cork moderna y escenario de muchos eventos culturales.

– South Parish: uno de los barrios más antiguos que visitar en Cork, lleno de pequeñas iglesias, historia y un ambiente muy auténtico.

– Cork Opera House: para disfrutar de teatro, música y espectáculos en el corazón de la ciudad.

Qué hacer en Cork con niños: los mejores planes en la ciudad

Si visitas la ciudad en familia seguro que querrás incluir algunos planes para los más pequeños de la casa. Por eso, aquí te doy algunas ideas de las mejores cosas que hacer en Cork con niños. Algunos los he mencionado anteriormente, pero merece la pena incluirlos en este punto ya que forman parte de la mejores opciones:

– Shandon Bells: este es sin duda uno de los planes más divertidos que hacer con niños en Cork ya que podrán tocar las campanas ellos mismos siguiendo las partituras que hay en la sala.

– Fitzgerald Park: zona verde con patos y espacios abiertos para correr y jugar.

– Blackrock Castle Observatory: es de lo mejor que hacer en Cork con niños ya que allí podrán jugar con exposiciones interactivas sobre el espacio, aprender cómo se forman las estrellas y hasta enviar un mensaje al universo.

– Holland Park: Si visitas el observatorio del castillo Blackrock no te pierdas este parque situado a menos de 1km de allí. Es un gran espacio verde que cuenta con zona infantil con toboganes gigantes donde los peques lo pasarán en grande.

– Biblioteca: las bibliotecas son siempre un recurso genial para hacer una pausa viajando con niños. La Cork City Library está situada en pleno centro de la ciudad y cuenta con una zona infantil con libros y algunos juegos perfecta para que los más peques disfruten de un espacio pensado para ellos.

Además de todo esto, si visitas Cork entre los meses de junio y agosto podrás disfrutar de The Playful Culture Trail. Un recorrido por 20 propuestas pensadas para que los más pequeños se diviertan mientras descubren la ciudad. Dispondrán de un mapa para poder  localizar los distintos puntos donde realizar las actividades y así completar el circuito sellando cada una de las realizadas.

Y si dispones de tiempo suficiente, te recomiendo acercarte hasta Ballincolling, una localidad a unos 9km al oeste del centro de Cork ciudad con dos grandes atractivos para peques:

– Ballincolling Regional Park: un enorme pulmón verde a orillas del río Lee con bosques, prados, caminos arbolados, zonas de deporte y un parque infantil muy chulo. Es uno de los parques más bonitos de todo el condado de Cork y un lugar ideal para pasar unas horas y disfrutar de un pícnic, de largos paseos y de mucho juego.

– Piccolo Play Village: un centro de juego de rol para peques con áreas temáticas y espacios inmersivos pensados para fomentar la imaginación. Está ubicado en la tercera planta del Castlewest Shopping Centre y requiere de reserva previa a través de su página web. Nosotros fuimos en dos ocasiones y es una de las mejores cosas que hacer en Cork con niños si necesitas una pausa para ti y un buen rato de juego para ellos.

Y si estás haciendo una ruta por el sur de Irlanda, sin duda uno de los planes estrellas para hacer con peques es visitar el Clonakilty Model Railway. Trenes en miniatura recorriendo paisajes, pueblos y estaciones de la región, además de toda una zona de juego, un parque infantil y un tren que hace un recorrido hasta el centro de la localidad.

*Tienes los lugares que visitar en Belfast con niños marcados en el mapa en color lila para que puedas ubicarlos fácilmente.

Qué ver cerca de Cork

Si dispones de más tiempo y quieres explorar los alrededores de la ciudad, aquí te propongo algunos de los mejores lugares que ver cerca de Cork:

Blarney Castle, el castillo más famoso que ver cerca de Cork

Si buscas un lugar imprescindible que ver cerca de Cork, el Blarney Castle no puede faltar en tu recorrido. Situado a tan solo 8 km de la ciudad, este castillo del siglo XV construido por la familia MacCarthy, es uno de los más famosos de Irlanda. La visita estrella es, sin duda, la Blarney Stone o Piedra de la Elocuencia. La tradición dice que quien la bese obtiene el don de la labia, esa gran capacidad de hablar con encanto y persuasión. Para besarla tendrás que tumbarte boca arriba y dejarte caer hacia atrás desde lo alto de la torre, sujeto por unas barras de hierro… ¡toda una experiencia que pone a prueba el vértigo! Pero el castillo es mucho más que su piedra mágica. Sus jardines son un auténtico espectáculo: el Poison Garden, con plantas venenosas y prohibidas (perfecto para los más curiosos), el Rock Close, envuelto en un halo de misticismo celta, y rincones románticos con lagos, cascadas y árboles centenarios que hacen que el paseo sea inolvidable.

Cobh, el último puerto del Titanic

A solo 25 minutos en tren del centro de la ciudad, Cobh es uno de los pueblos más bonitos y con más historia que visitar cerca de Cork. La imagen de las casitas de colores en pendiente de Deck of Cards con la imponente Catedral de St. Colman detrás dominando la bahía, se ha convertido en una de las estampas más icónicas del país. Una gran idea es contratar esta visita guiada por Cobh con entrada a la catedral para poder conocer todos los secretos de esta preciosa localidad costera de la mano de un guía español.

Pero si algo hace mundialmente famoso a este lugar es su relación con el Titanic. Cobh fue el último puerto donde el mítico transatlántico hizo escala en 1912 antes de zarpar hacia su fatídico destino. Hoy puedes revivir aquella historia en el Titanic Experience Cobh, un museo interactivo instalado en la antigua oficina de billetes de White Star Line. Además, Cobh está muy ligado a la historia de la emigración irlandesa. Desde este puerto partieron millones de irlandeses en los siglos XIX y XX rumbo a América en busca de un futuro mejor, un episodio que podrás descubrir en el Cobh Heritage Centre.

Kinsale, el pueblo más colorido y gourmet de Irlanda

A solo 30 minutos en coche desde Cork, se encuentra Kinsale, un antiguo puerto pesquero que hoy se ha convertido en uno de los pueblos más pintorescos y con más ambiente que visitar cerca de Cork. Sus calles estrechas están repletas de casas de colores, galerías de arte, tiendas artesanales y pubs acogedores. Kinsale también es conocido como la capital gastronómica de Irlanda, así que es un sitio perfecto para darse un capricho. Aquí encontrarás algunos de los mejores restaurantes de marisco del país, junto a tabernas tradicionales donde probar platos locales con un toque moderno.

En cuanto a historia, el gran protagonista es el Charles Fort, una imponente fortaleza estrellada del siglo XVII que custodia la entrada al puerto. Sus murallas ofrecen unas vistas espectaculares del mar y de la bahía. Muy cerca está también el James Fort, más pequeño pero igualmente interesante. Además, Kinsale es punto de partida de la Wild Atlantic Way, una de las rutas costeras más famosas del mundo. Si tienes coche, merece la pena continuar un poco más hacia el sur para descubrir acantilados, faros y playas salvajes.

Jameson Distillery Midleton, la visita cerca de Cork para amantes del whiskey

Si eres amante del whiskey o simplemente te apetece vivir una experiencia 100% irlandesa, no puedes perderte la visita a la Jameson Distillery Midleton, situada a solo 20 minutos en tren desde Cork, en la localidad de Midleton. La destilería ocupa una antigua fábrica del siglo XVIII que fue restaurada y hoy se ha convertido en todo un templo para los amantes de esta bebida. Durante la visita descubrirás cómo se elabora el whiskey irlandés, desde la molienda del grano hasta el envejecimiento en barricas de roble. Te recomiendo reservar la experiencia aunque sea en inglés ya que, según dicen, es muy completa y finaliza con una cata guiada y una copa de Jameson.

Anillo de Kerry, la excursión más bonita que hacer desde Cork

El Anillo de Kerry es una de las rutas panorámicas más espectaculares de Irlanda. Situada al suroeste del país, este recorrido circular de unos 180 km combina montañas, lagos, acantilados y pueblos con encanto, ofreciendo una de las vistas más bonitas de la isla. A lo largo del trayecto se pueden hacer paradas en lugares icónicos como el Killarney National Park, Ladies View, los Kerry Cliffs, el Cahergal Stone Fort o playas como Rossbeigh Beach y Derrynane Beach. Lo ideal es dedicarle dos día a la ruta para hacerla con calma, pero es posible completar el recorrido en un solo día haciendo paradas más cortas. Si no dispones de coche o prefieres simplemente disfrutar de la ruta sin tener que conducir, te recomiendo esta excursión guiada de un día al Anillo de Kerry que sale desde la ciudad de Cork.

Mapa de lugares que ver en Cork y alrededores

Aquí tienes un mapa con todos los lugares que ver en Cork de los que te he hablado para que puedas localizarlos fácilmente y organizar tu ruta de la mejor forma.

Cómo llegar a Cork

Cork es la ciudad más importante del sur de la isla y la segunda más grande en cuanto a población de toda Irlanda. Por ello, no es de extrañar que esté bien conectada tanto por aire, como por tierra. Aquí te hablo de las principales opciones de cómo llegar a Cork y te doy algún que otro consejo.

Avión

El aeropuerto de Cork (Cork Airport) recibe vuelos desde varias ciudades europeas y está a solo 10 km del centro. Puedes encontrar vuelos desde España menos de 20€ por trayecto, por lo que es una opción genial para llegar a Irlanda y disfrutar de una escapada por la zona sur del país o como punto de inicio de un recorrido por la isla.

Tren

La estación de tren de Cork está conectada con Dublín y otras ciudades irlandesas mediante la Irish Rail. Así que si planeas un recorrido por Irlanda sin coche, puedes llegar a Cork en tren en unas 2 horas y media desde la capital de la República así como desde otros puntos de la isla.

Autobús

Varias líneas nacionales conectan Cork con Dublín, Limerick, Galway y otras ciudades. Así que ésta es también otra opción genial para llegar sin necesidad de coche y además, más económica que el tren.

Coche

Por último, la forma más habitual de llegar a Cork es en coche de alquiler o coche propio como hicimos nosotros. Si éste es tu caso, te recomiendo aparcar en el Black Ash Park & Ride si planeas visitar la ciudad en un día. Este parking tiene un precio de 5€ e incluye el autobús gratuito que te llevará hasta el centro en apenas 10 minutos y te traerá de vuelta al parking tras tu recorrido por la ciudad. Hay que tener en cuenta que éste abre de 6.45 a 20.30h de lunes a sábado y que, además de estar cerrado los domingos, no se permite la pernoctación. En cualquier caso, si planeas pasar alguna noche en Cork, lo mejor es alojarse en un hotel con parking para evitar problemas de estacionamiento. Te recomiendo algunas opciones en el siguiente punto.

Dónde alojarse en Cork

Si quieres recorrer los lugares imprescindibles que ver en Cork en un día y pasar una noche en la ciudad, lo mejor es que te alojes en el centro para poder moverte andando. La mayoría de los hoteles que te recomiendo a continuación disponen de aparcamiento, por lo que si llegas en coche, el estacionamiento no será un problema.

Si estás viajando sol@ o buscas un lugar económico y no te importa compartir baño o incluso habitación, el Sheilas Tourist Hostel tiene pinta de ser una gran opción. Dispone de aparcamiento y ofrece precios muy buenos teniendo en cuenta que el alojamiento en Cork es generalmente bastante caro.

Si no quieres renunciar a la comodidad de disponer de una habitación privada con baño, te recomiendo el Leonardo Hotel Cork. Cuenta con parking y está sumamente bien localizado en pleno centro. Los precios son medios e incluso en algunas fechas puedes encontrar buenas ofertas.

Si viajas con peques, la opción que elegiría yo sería la del Residence Inn by Marriott Cork. Ofrecen estudios perfectos para familias o para quienes quieren disponer de una pequeña cocina y un espacio más grande que una sola habitación. Está situado en pleno centro de la ciudad y dispone también de aparcamiento privado.

Si ninguna de las opciones te convence, te animo a que pruebes con el intercambio de casas. Es la forma de alojamiento que elegimos nosotros en la mayoría de nuestras aventuras desde hace más de 10 años y nos encanta. En este caso pasamos 20 días en una casa situada a 20 minutos en coche de Cork en plena naturaleza y disfrutamos mucho de la experiencia. Como siempre, ¡no dudes en preguntarme ante cualquier duda!

Consejos prácticos para visitar Cork

Para que puedas preparar tu visita a Cork de la mejor forma y evitar imprevistos, aquí te doy algunos consejos prácticos que seguro pueden ayudarte. 

Cómo moverse por Cork

El centro de la ciudad es compacto y se puede recorrer caminando sin problema. Podrás llegar a los principales lugares que ver en Cork andando y en caso de necesitar tomar el transporte público, la red de autobuses conecta todos los puntos de la ciudad. Otra gran opción si no quieres patear tanto o viajas con peques es coger este Autobus turístico de Cork. Podrás subir y bajar todas las veces que quieras y conocer la ciudad cómodamente.

Moneda y pagos

La moneda es el euro (€), por lo que si viajas desde España o desde cualquier otro país de la zona Euro podrás pagar con tus tarjetas habituales sin preocuparte por nada. Tanto en Cork como en el resto de la República de Irlanda podrás realizar cualquier pago con tarjeta, por lo que el efectivo no es un imprescindible. Aún así, si quieres contar con tarjetas recargables perfectas para viajar, te recomiendo por un lado la N26. Si la pides desde este enlace conseguirás 15€ de regalo al solicitarla, activarla y hacer una primera recarga. Y por otro lado, la versión gratuita de la Revolut que ofrece hasta 200€ de retirada al mes de forma gratuita. Puedes pedirla desde este enlace.

WiFi y roaming

No tendrás problema en encontrar WiFi allá donde vayas, la mayoría de cafés y restaurantes ofrecen WiFi gratis. Además, en la República de Irlanda podrás mantener tu tarifa telefónica como en España, pero revisa tu roaming si viajas desde fuera de Europa o tienes intención de visitar Irlanda del Norte. Para ello te recomiendo las eSIMs de Holafly, para las que dispondrás de un 5% de descuento desde este enlace.

Cobertura médica

No viajes nunca sin seguro. Aunque cuentes con la Tarjeta Sanitaria Europea (TSE), debes saber que ésta no cubre la sanidad como en España donde es gratuita en su totalidad. La TSE te cubre las mismas condiciones que la sanidad del país visitado, y en muchos casos, existen copagos y algunas restricciones. Además, los seguros de viajes ofrecen muchas coberturas extras tanto médicas como de servicios, compensaciones… Nosotros siempre viajamos con Heymondo, con quienes tienes un 5% de descuento desde nuestro enlace. Nuestra experiencia con ellos ha sido siempre un 10 y su chat médico 24 horas nos ha salvado en más de una ocasión de tener que desplazarnos hasta un centro médico.

Por último recordarte que ¡no te olvides de llevar tus adaptadores de enchufe de 3 clavijas y un buen chubasquero o paraguas!

Como ya habrás visto, además de todos los lugares interesantes que ver en Cork ciudad, esta localidad es también la puerta de entrada a algunos de los rincones más mágicos del sur de Irlanda. Por ello, es un destino perfecto para una escapada y un lugar destacado en una ruta por la isla esmeralda. ¿Listo para dejarte conquistar por el encanto rebelde de Cork?

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